A vida não é só isso que se vê, é um pouco mais – Paulinho da Viola – Sei lá Mangueira

La vida no es sólo eso que se ve, es un poco más.

miércoles, 18 de noviembre de 2015

LA TORZIDA EN GRANADA CON SAMBIOSIS

Hace tres semanas La Torzida hizo un intensivo de Samba Enredo en Serrada. Cuni Mantilla, de Sambiosis, nos enseñó nuevos ritmos y técnicas para Carioca y la experiencia nos encantó tanto que nos quedamos con ganas de más.

El mestre granadino nos había invitado a pasarnos por el local de Sambiosis cuando quisiéramos para pasar un ratito más de convivencia batuquera y ¡no hemos tardado en aprovechar la oportunidad!



Este mismo fin de semana, Sara, Mónica y Yuri -recientes incorporaciones de La Torzida- hemos hecho una visita al taller de percusión de Sambiosis (Granada) que precisamente este sábado pasado hacía un intensivo de samba afro con Cuni.

Salimos de Valladolid el viernes, tarde, pero muy animados. El viaje de ida sirvió para repasar el repertorio de la Torzida,  y también para repasar nuestros temas favoritos de Ilê Aiyê, Olodum y Timbalada. Yuri nos iba explicando las letras de las canciones, su significado y sentido dentro de su propio contexto cultural. (Hay que confesar que en el último tramo de viaje nos pudo el sueño).

El sábado por la mañana, antes de ir al local, nos encontramos con un bloco recién formado llamado “Residual Samba” en la Plaza Nueva de Granada. Es una batucada femenina de Madrid que se estrenaba tocando en la marcha en conmemoración del día mundial de la diabetes convocada por la Asociación Granadina de Diabéticos (AGRADI).

Muchas de las percusionistas eran caras conocidas del reciente festival Al-Sambalus o de haber venido a Samba Embora 2015. ¡Qué ilusión! ¡No pudimos evitar sacarnos una foto con ellas!


















Juntos con nuestro anfitrión Iker, que también estuvo en el intensivo de Serrada y está en el taller de Sambiosis, llegamos al local donde ya estaba Cuni impartiendo la clase.

Un saludo, un abrazo y ¡a tocar!


A medio día paramos para comer. Y es que resulta que en los intensivos de allí, una vez al mes, todo el mundo trae comida para compartir. Nosotros no íbamos a ser menos: un par de botellas de vino vallisoletano, cuarenta toneladas de cuscús, empanada personalizada (enhorabuena Mónica), y el brownie mejor arrebañado del mundo... ¡Que se note que venimos a celebrar esa convivencia!

Hablando con los alumnos del taller y con los mestres hemos compartido ideas, experiencias, metodologías... ¡Siempre es bueno saber más!


















Tras el descanso, retomamos el ensayo hasta las tantas de la tarde. Para despedirnos, una sesión de flamenquito (que estamos en Andalucía) y despedida de esa gente maravillosa llena de energía, de Cuni, que se marchaba al día siguiente a Chile a tocar y de Javi,  amigo de nuestro mestre Dani, que nos acercó al centro de la ciudad. ( ¡Te manda un saludo, Dani!)

Con manos hinchadas, ampollas y heridas por curar (todo esto con mucho amor y alegría), pasamos lo que nos queda de finde con Iker disfrutando de las tapas de la ciudad, paseando por el Albayzín y el mercado.


Al día siguiente, viajamos a las termas de Santa Fe, y terminamos nuestro viaje comiendo unas pizzas artesanas en una terraza con vistas a la Alhambra en la casa de nuestra amiga Alma que nos acogió en este viaje.

¡Adiós, Iker, Cuni, Sambiosis! ¡Adiós Granada! Volveremos, seguro.









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